Skip to content Skip to sidebar Skip to footer

Sanitizante

¿Qué significa sanitizar?

La sanitización es un tratamiento higiénico que elimina los virus / patógenos presentes en un objeto o superficie mediante el uso de productos físicos o químicos, que reciben el nombre de “agente sanitizante”.

El procedimiento limpia y erradica todos los elementos contaminantes que representan amenazas importantes para la salud pública, tales como virus y bacterias.

Sanitizar y limpiar, a pesar de que a veces se utilizan como sinónimos, no son lo mismo. La limpieza es una medida de sanidad básica que nos ayuda en la remoción de partículas perceptibles de suciedad y la disminución de microorganismos inofensivos o materiales contaminantes, como tierra y grasa.

Mientras que los productos de limpieza contienen propiedades con una capacidad de acción mínima y limitada, los sanitizantes incluyen concentraciones más elevadas y especificas, tales como:

Hipoclorito de sodio.
Amonio cuaternario.
Triclosán.
Soluciones yodóforas.
Ácidos peracéticos.
Dióxido de Cloro.
Glutaraldehído.

¿Cómo se lleva a cabo correctamente un proceso de sanitización?

Muchos productos sanitizantes pueden ser adquiridos fácilmente en supermercados o centros de distribución especializados, pero eso no quiere decir que sea segura su aplicación sin el debido conocimiento.

Un protocolo de sanitización exitoso empieza por contar con el equipo necesario para la manipulación de sustancias químicas y el certificado gubernamental que exige la normativa para tales actividades.

Teniendo en cuenta qué son los sanitizantes y cómo funcionan, es evidente que los protocolos de sanitización son muy efectivos para evitar la proliferación de microorganismos tan dañinos como el COVID-19.

Sanitizante

¿Qué significa sanitizar?

La sanitización es un tratamiento higiénico que elimina los virus / patógenos presentes en un objeto o superficie mediante el uso de productos físicos o químicos, que reciben el nombre de “agente sanitizante”.

El procedimiento limpia y erradica todos los elementos contaminantes que representan amenazas importantes para la salud pública, tales como virus y bacterias.

Sanitizar y limpiar, a pesar de que a veces se utilizan como sinónimos, no son lo mismo. La limpieza es una medida de sanidad básica que nos ayuda en la remoción de partículas perceptibles de suciedad y la disminución de microorganismos inofensivos o materiales contaminantes, como tierra y grasa.

Mientras que los productos de limpieza contienen propiedades con una capacidad de acción mínima y limitada, los sanitizantes incluyen concentraciones más elevadas y especificas, tales como:

Hipoclorito de sodio.
Amonio cuaternario.
Triclosán.
Soluciones yodóforas.
Ácidos peracéticos.
Dióxido de Cloro.
Glutaraldehído.

¿Cómo se lleva a cabo correctamente un proceso de sanitización?

Muchos productos sanitizantes pueden ser adquiridos fácilmente en supermercados o centros de distribución especializados, pero eso no quiere decir que sea segura su aplicación sin el debido conocimiento.

Un protocolo de sanitización exitoso empieza por contar con el equipo necesario para la manipulación de sustancias químicas y el certificado gubernamental que exige la normativa para tales actividades.

Teniendo en cuenta qué son los sanitizantes y cómo funcionan, es evidente que los protocolos de sanitización son muy efectivos para evitar la proliferación de microorganismos tan dañinos como el COVID-19.

Mostrando 1–9 de 19 resultados